Garantías

Con objeto de garantizar y dar fe de las buenas prácticas de producción ecológica, en nuestros productos aparecen los siguientes distintivos.
 
Certificación de producción agraria ecológica ES ECO 019 CT de la Unión Europea, el cual establece y garantiza la normativa de producción, elaboración, etiquetado y sistema de control de nuestros brotes germinados. De este modo podemos asegurar que nuestros productos son alimentos no contaminados.
 
Sello del Consell Català de la Producció Agrària Ecològica (CCPAE). Los técnicos de este organismo realizan auditorías periódicas a lo largo de todo el proceso de producción, elaboración y envasado.
 
Certificado de conformidad del Consorcio para el Control de la Producción Biológica (CCPB) que avala que la semilla que adquirimos en Italia es 100% ecológica.
 

¿Porqué cultivo ecológico?

Por salud
Por respeto al medio ambiente

Las semillas son nuestro tesoro más preciado. Sólo utilizamos las de procedencia ecológica certificada según los estándares europeos. Las plantas de las que se obtienen no han sido tratadas con pesticidas, fertilizantes u otros fitosanitarios químicos de síntesis.

Las semillas tampoco pueden tratarse para su almacenamiento prolongado más allá de lo que autoriza la estricta legislación vigente.

Así, respetando nuestra materia prima, es como también respetamos el medio ambiente, favoreciendo la conservación de suelos equilibrados y biodiversos.

 

Compromiso con la tierra

Envase biodegradable

Desde sus inicios, Cultius Ecològics del Valles ha sido una empresa comprometida con el medio ambiente. Por ese motivo nos preocupa minimizar nuestra huella en la Tierra. En este sentido hemos apostado por el uso de plástico ecológico en nuestros envases.

  • El origen de nuestros contenedores está en las plantas. El maíz y la patata, entre otras verduras, transforman el dióxido de carbono y el agua en azúcares. Lo hacen a través de las hojas y raíces con el impulso de la energía solar.
  • El almidón obtenido de estos cultivos es la materia prima. Con la ayuda de microorganismos, se somete a un proceso de fermentación. El resultado es el granulado plástico ecológico y no contaminante, con el que se fabrican nuestros envases.
  • Estas terrinas son biodegradables, de manera que, depositándolas en el contenedor de los residuos orgánicos, terminan transformándose en compost en un plazo de entre 8 y 12 semanas. El producto resultante se vuelve a incorporar en el ciclo como fertilizante para las plantas.

Compromiso de calidad